Sì no alcanzaba con las experiencias de “Gran Hermano”, donde un grupo de personas es encerrado voluntariamente y observado por millones., leo en Online2.0 : “…Un hombre, una habitación de un hotel, 4 paredes, un ordenador con conexión a internet y un cactus antiradiación, estas son las únicas cosas de las que dispondrá Daniel Mucarsel (aka Billy) para superar el experimento sociológico-promocional que está llevando a cabo la Agencia de Comunicación OgilvyOne a través de su Desafío Digital
Billy deberá permanecer durante 10 días (hasta el 27 de Septiembre) en una habitación de un hotel de Barcelona, eso si, sin dinero ni tarjetas de crédito. Tiene que buscarse la comida por la cara, conseguir que la gente se la regale, todos los dias. Por si fuera poco, todos los días tiene que conseguir un reto (o varios), ayer era salir en una cadena de televisión conocida (lo ví en Antena3) y conseguir un par de entradas para el concierto de Police, y consiguió ya una. Todas sus aventuras las va colgando en Youtube”
Encerrado, sin dinero, teniendo que buscarse la comida y pidiéndole a la gente que le regale cosas, se parece tanto a vidas sudamericanas pauperizadas, pero no confundirse esto es un hotel y es un experimento, lo otro solo la realidad del otro lado del rio.
Qué vida digital ni qué vida digital! Seguro que no es la primera experiencia de este tipo pero probablemente es la primera en la que desde lo real pasando por lo virtual se conecta lo real con lo real. Ehhh, no sé si quedó claro, en todo caso parece interesante.
Los modos que están tomando los experimentos de este tipo son disímiles, como aquél del sospechoso de ser espía que optó por hacer su vida totalmente pública.
Un ejemplo más de relaciones mediadas por tecnología en la que se agregan algunos elementos que para nosotros como psicólogos pueden ser interesantes. Creo que tipos como Stanley Milgran tendrían bastante entretenimiento en esta época.
Por otro lado, last but not least, el contenido mercantil y publicitario del asunto es como obvio, no? El último días las cadenas estarán peleándose por mandarle comida, espero que la pueda guardar en el refrigerador… ja, ja… En todo caso, creo que de hambre no se muere.
Se lo dijo incluso alguien en el blog:
Un beso,
¿Tengo que aclarar acaso que apuesto por las bondades de estas intermediaciones? Quizás la expresión del principio de mi comentarios pone las dudas. Lo que me llamaba la atención era que es una relación real-real, no real-virtual. Si pensaras a Billy como un avatar tendría el mismo impacto? Probablemente no. Pero como experimentación está interesante. habrá que ver lo que viene…